El día que Amanda dejó de hablar era martes, y llovía. La enfermera había abierto la puerta de su habitación y le había dicho, en aquel tono falsamente jovial que Amanda repudiaba, que alguien había venido a verla. Amanda había contestado que no quería ver a nadie, y le había dado la espalda. La enfermera se había vuelto hacia su acompañante y le había dicho que si, por favor, podía volver en otra ocasión.
- Amanda, soy Ian!- gritó él.
- ¿Ian?-dijo ella. La voz le temblaba.-Oh, por favor, vete. No quiero que me veas así.
- Amanda, por favor, es importante.
- Está bien.-se resignó ella.
- Dos minutos.- le advirtió la enfermera, y se apartó para dejarle pasar.
- Amanda... Oh, Dios mío, que flaca estás.
- No es...-comenzó a decir ella, pero Ian la hizo callar colocándole el dedo índice sobre los labios. Se sentó en el borde de la cama, junto a ella.
- Dos minutos-le recordó él.- Amanda, le dije a mi madre que estabas ingresada en el hospital porque tenías neumonía, pero mi madre habló con la tuya y ella le dijo la verdad. Yo intenté hablar con ella y le dije que saldrías tan pronto como estubieses recuperada, pero no me quiso escuchar.-dijo, de corrido.-Amanda... mi madre no quiere que te vuelva a ver.
Amanda desenfocó la mirada. Trató de asimilar la idea durante unos segundos, pero como le resultaba imposible, lo dejó para más tarde.
-Ah...-se limitó a decir, muy bajito.- ¿Cómo está Victoria?
- Bien.- susurró Ian.
- Claro... Ella siempre estuvo bien.
La enfermera entró, le dijo a Ian algo a lo que Amanda no prestó atención y ambos se marcharon. Antes de que la puerta se cerrase por completo, a Amanda le pareció escuchar como él se disculpaba. Le pareció sentir la cálida mano de Ian contra su gélida mejilla durante un instante.
Amanda tardó exactamente diez segundos en reaccionar. Entonces, una lágrima solitaria se deslizó por su rostro hasta llegar a la comisura de los labios. Amanda gritó.
Ian era la única persona por la que había valido la pena luchar por salir de aquel pútrido lugar. La única persona por la qual había vivido. Ya nada tenía sentido para ella.
5 comentarios:
y esta tal amanda?ya me contaras de que va todo por que me perdido un poco,mi capacidad mental no da para más.Sobre lo de el fragmento que pedazo fragmento escribi quizás me da y la continuo nose ya vere lo que ago (L)
me encantaaaa ♥ viva amanda ahora! x] aunqe sigo encaprichada con Christine haha,
ahora me paso a leer la entrada anterior qe me la salté de la nada! =P ^.^
Tía, que me he borrado los blogs y nunca coincidimos en el messenger. No tengo saldo para llamarte al móvil ni para un sms, no sé en casa de quién estás y por eso no llamo a los fijos. Lyra, no se nada de tí, joder. Mañana es Navidad ya, que pronto ha llegado. Y yo no sé nada de tí hace casi un mes, o quizás exagero pero parece incluso más. Anda, da alguna señal... porfavor. Necesito volver a leer tus textos antes de que los publiques para ''darles el visto bueno''... y que me cuentes paranoyas y nos riamos ._. Tía, que no se nada de tí jodeeeeeer xD
Me pongo histérica. ¿Estás bien?
Contesta aquí aunque sea...
En cuánto al texto, me gusta, me gusta bastante más que el anterior. Pero no caigo en quién es. Quizás ni me lo dijiste... Ya lo unirás todo. Entonces me enteraré de algo y no por partes xD Si así ya mola, todo junto debe estar... pf. No dejes de escribir, te lo digo siempre, pero no quiero que lo hagas. Por si acaso no te conectas antes de mañana, Feliz Navidad :) Y si no te conectas antes de fin de año... Feliz año nuevo, también.
Espero que el año que viene, este 2010 nos veamos sí o sí... bueno, no lo espero; Sé que nos veremos. ¿Vale?
Te quiero chica con más cerebro que gente de mi clase xDDDDDDD
Contestameeee (L) ;_____;
Feliz Navidad Laia :)
Laiia , me gustaa ^^
felis navidad guapisima (LL)
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