Suena el despertador y Ann se incorpora. Las 06:47.
"¿Porqué?, piensa Ann mientras se levanta y camina descalza hacia el lavabo. Una vez delante del espejo, se recoge el pelo y se lava la cara con agua fría. Se despoja del pijama y se da una ducha de agua templada.
Despierta bruscamente y comienza a tiritar. Se envuelve en una descolorida toalla amarilla y se suelta el pelo de nuevo. Vuelve a su cuarto descalza y con los pies mojados.
Delante de la puerta la espera Naranjín, su gato. Ann se inclina y le rasca la cabeza, y Naranjín responde con ronroneos. Se pone en pie y abre su armario. Toda la ropa es igual, aburrida, excepto aquel vestido blanco que sólo le puede quedar bien a ella. Lo descuelga y se lo pone, mientras mira de reojo al reloj. Las 07:11. Su mirada pasa a los zapatos que la esperan a los pies de su cama. Pero Ann cree que los vestidos blancos están hechos para ir descalza, y de ese modo va a la cocina a desayunar. Narajín la sigue y se restriega contra sus piernas mientras Ann prepara tostadas y las unta con mermelada de fresa. Vierte un poco de leche en una taza y se la lleva, junto con las tostadas, al comedor.
Enciende la televisión y se sienta en el sofá para enterarse de las noticias destacadas del día.
Tras escuchar los titulares (que hablan de inundaciones y modelos que agreden a sus conductores y después se dan a la fuga), Ann decide que nada de eso le interesa y la apaga.
Su vida es monótona. La de los demás no tiene porqué ser mejor.
Muerde una tostada y el vestido se le llena de migas. Naranjín se acomoda a su lado. Parece estar muy interesado en la mermelada de fresa que Ann retira inmediatamente de su vista.
Se termina rápidamente el desayuno, se pone en pie y se dirige a la cocina. Naranjín la sigue y se sienta a sus pies mientras Ann lava los platos y los cubiertos sucios. Después, coge al gato en brazos, le acaricia el vientre y le lleva hasta el comedor.
Se tumba en el sofá y acomoda a Naranjín sobre su pecho. El gato se enrosca y ronronea fuerte. Su abuela le diría que se sacase al gato de encima, que le estaba llenando el vestido de pelos, pero a Ann eso le da igual. De hecho, hay muchas cosas que le dan igual a Ann.
Dirige la mirada a su reloj de péndulo, situado a la izquierda de la televisión. Su abuela se lo había regalado cuando Ann se independizó, pero ella lo odia porque las campanadas la despiertan cuando se queda dormida en el sofá, lo cual sucede bastante a menudo. Las 07:30.
Ann cierra los ojos y deja que la luz del sol que comienza a filtrarse a través de las cortinas le acaricie los párpados.
A Ann no le gusta nada madrugar, pero prefiere hacerlo para poder relajarse antes de salir de casa. Le encanta recibir a los primeros rayos de sol tumbada en el sofá con Naranjín.
Veintiún minutos después despierta absolutamente convencida de que ya es de noche y ha perdido el día entero. Se pone en pie rápidamente y su gato cae al suelo emitiendo un sonoro bufido. Se peina el cabello color chocolate con las manos y corre hacia su cuarto. En el suelo descansa su guitarra, en el interior de una funda negra sencilla. Se la cuelga del hombro, se calza y se dirige a la puerta de salida.
Naranjín la espera. La mira con cara de pena mientras coge las llaves y abre la puerta. Entonces maúlla. Ann mira el reloj y sonríe. Las 07:53.
Baja las escaleras y se dirige al metro sin que la sonrisa de su rostro se borre por completo. Aquella mañana ha llegado a una conclusión: Los gatos no maúllan antes de las 07:53. Lo que Ann no sabe es que Naranjín es un buen gato con un nombre absurdo, y que la mayoría de gatos normales adoran despertar a sus dueños mientras estos sueñan con ovejas de colores y elefantes que vuelan.
Hoy cantará en el interior del vagón del metro hasta que llegue a plaza Cataluña. Una vez allí, buscará un buen sitio en el andén y cantará hasta la hora de comer. Por la tarde, se dirigirá a la plaza de San Felip Neri. Con un poco de suerte, se encontrará con el chico tímido del otro día.
Hoy empezará con Asleep de The Smiths, una de sus canciones favoritas. Ann está de buen humor.
6 comentarios:
Me encanta la historia de Ann, lleva la vida bohemia que muchisimos desean..
Me encanta laia ya lo sabes ^^ aver si escribes dentro de poco qe tengo ganas de saber como sigue xD
Joder. No lo he visto hasta hoy. Que no te conectas, y si lo haces no te veo nunca. Me dijiste que me lo pasarías antes y me quedé con la idea de "no lo colgará". Pero entiendo que si no hablamos quieras colgarlo, rápido. A lo que iva. Me gusta, aunque suprimiría dos o tres ''Naranjín'' y dos o tres ''Ann''... Están muy repetidos. Pero está genial. Me recuerda a una chica con la que me topé en el tren, que cantaba millones de veces mejor que muchas cantantes famosas. Me quedaría escuchandola cantar todas las paradas... pero era hora de llegar a casa, y sólo duró 2. Me gusta. No pares tía, ya sabes.. tienes algo.
T'estimo :)
Vaya, me ha gustado tu narrativa, en verdad que tienes una fluidez con las palabras bien buena hasta dar un recursivo final, pero a medida que transcurre la historia, atrapas lentamente.
En otra oportunidad te seguiré leyendo, suerte.
aaaaah, me encanta la historia de Ann a mi también, me encanta todo lo que escribes =)
bbeesitos diosísima =)
“Pero Ann cree que los vestidos blancos están hechos para ir descalza”
“Su vida es monótona. La de los demás no tiene porqué ser mejor”
“El gato se enrosca y ronronea fuerte. Su abuela le diría que se sacase al gato de encima, que le estaba llenando el vestido de pelos, pero a Ann eso le da igual”
“aquella mañana ha llegado a una conclusión: Los gatos no maúllan antes de las 07:53. Lo que Ann no sabe es que Naranjín es un buen gato con un nombre absurdo”
mis frases preferidas, de esas q subrayas en los libros.
estoy de acuerdo con Lourdes sobre los "Ann" que podrían convertirse en "ella" alguna vez, pero una vez publicas eso lo corrige el corrector de estilo, no es algo d lo q preocuparse pq no es estructural. tienes muy claro lo que quieres decir y como lo quieres decir, eso es lo importante.
me gusta el cambio de punto de vista d la 1º parte a la 2º.
me gusta Ann.
besos prima, a ver si podemos vernos un dia.. tendremos q ponernos de acuerdo entre los mas jovenes.
y sobre todo, no lo dejes.
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