24 de agosto de 2010

Te quiero, aunque ya estés rota.

...Ian y Amanda han pasado la noche juntos, despiertos. A las seis y media de la madrugada amanece y Amanda se duerme. Ian prefiere mirarla a ella porque amaneceres habrán muchos más, pero Amanda solo tiene una. Le acaricia la espalda y contempla el montón de huesos en el que se ha convertido. Se marcan como púas, los huesos, como un erizo. Ian la abraza.
- Me da miedo romperte.
Amanda se revuelve y sonríe en sueños.
Una hora y media más tarde, despierta. Ian la mira.
- Tengo hambre-dice él.
Y se pone en pie.
- ¿Chocolate?
- .
Ese sí es tan pequeño, tan minúsculo, que Ian cree habérselo imaginado. Le prepara el desayuno mientras ella, en ropa interior, enciende la calefacción.
Se sientan en la mesa el uno delante del otro, con las tazas entre ellos. Amanda mira a Ian mientras él da un sorbo. Después, su mirada pasa al chocolate deshecho, al que mira como si fuese veneno. Levanta la taza y, sin despegársela de los labios, bebe todo su contenido. Cuando la deja encima de la mesa, los labios le tiemblan. El líquido recorre sus entrañas tan cálido y dulce como la vida misma. Ian la mira. Coge una galleta y la hunde en el chocolate. Los ojos de Amanda se han llenado de lágrimas.
- Me doy asco -dice ella. Y se pone en pie y corre hacia el cuarto de baño.
Él la sigue. Se la encuentra arrodillada frente al inodoro, vomitando. Ian le recoge el pelo con las manos, mientras el corazón y el alma se le rompen en mil pedazos al contemplar a la única persona a la que quiere tanto como su vida destruyéndose a sí misma. Vaciándose las entrañas.
- No quiero que me lo ocultes más.
Amanda llora sobre la tapa del inodoro, con el rostro escondido.
- Te quiero -dice él-, aunque ya estés rota.

2 comentarios:

Neus dijo...

te quiero, aunque ya estes rota (me ha matado la frase º.º) Sigue escribiendo, no como yo e.e Au revoir miss malzieu(L)

Arita dijo...

No sé si estoy demasiado sensible, o es si es que realmente es un texto realmente melancólico..
Me mata su historia, pero me siento fascinada por ese tipo de historias. Tienen, no sé, cierta magia..
Veronika decide morir es, creo, el segundo o tercer libro que leí de Coelho :)